dc.description.abstract | El paciente geriátrico presenta una serie de características que aumentan el riesgo de enfermedades bucodentales y que con frecuencia dificultan que todas las medidas preventivas y terapéuticas disponibles puedan llevarse a cabo en forma ideal.
El miedo a la intervención, la aceptación generalizada de la pérdida dental y aparición de otras enfermedades bucales de consideración como parte inherente del envejecimiento, las dificultades económicas, el padecimiento de enfermedades crónicas y sus consecuencias, los efectos colaterales de los fármacos utilizados para el tratamiento de los diferentes tipos de padecimientos; pero en especial, el desconocimiento de las repercusiones de la mala higiene bucal, los hábitos de consumo alimentario inadecuados, los problemas de accesibilidad a las consultas dentales y la consideración de la atención dental como un lujo y no como necesidad, pueden influir en la salud oral del adulto mayor. La atención odontológica del paciente adulto mayor empieza por un enfoque esencialmente de promoción y preventivo basado en la educación, tanto del paciente, como del personal o familiar que se encuentre a cargo de su cuidado. Sin embargo, una vez que su salud bucal requiere atención, el odontólogo necesita contemplar en su valoración los principales síndromes geriátricos con el fin de disminuir los riesgos y favorecer su funcionalidad. | es_ES |